viernes, 26 de agosto de 2016

De guardia

Soy médico. A veces me cuesta creerlo. Me siento de prácticas, me siento contenta, aprendiendo... como sinfuese un juego. Es cuando me canso, es cuando no llego.... ahí me doy cuenta. En el parón de una guardia, cuando agotada y seria bajo la mirada: me veo vestida de azul, la identificacion de medico que cuidadosamente me quito; el fonendo del cuello, que dejo a mi lado; la rutina de comprobar que el busca tiene batería... con la ropa del día me meto en la cama, sin fuerzas y sin saber cuanto dormiré; cada día nuevos compañeros de habitacion, y mi verdadera casa vacía... querria estudiar más, saber más, salir más, hacer más deporte, descansar más, preocuparme más por la gente, compartir más con otros, y tener más ratos para mi... me falta tiempo, pero no ganas. Soy feliz, en este cuarto de guardia. Muchos sentimientos cada día... pero más allá de emociones puntuales, sí, soy feliz.  Aunque ría, llore, me frustre, sufra, me divierta, me sienta insegura, orgullosa, amada o sola. Estoy aqui, sin más... ni menos.