domingo, 12 de febrero de 2017

Vuelvo a escribir

Vuelvo a escribir, tras tiempo sin hacerlo. Vuelvo a escribir, aprovechando el anonimato. Ya no soy estudiante de medicina, ahora soy Residente. Sí, eso por lo que tanto he luchado. Y ahora que lo soy, no estoy segura de querer celebrarlo.

Necesito tiempo para mí, no para llenarlo con hobbies: necesito tiempo para mí (gracias a dererminada persona por calarme tan bien...), para pararme a reflexionar, o a no pensar; para darme cuenta de que yo elegí esto, la vida que llevo. Necesito recordar que es un premio y no un castigo; pararme a comprobar que disfruto, que me gusta la medicina y que no es solo una carga. Necesito recordar quién soy, que sigo estando allí, que entre mis miedos se sigue escondiendo la chica ilusionada, sencilla y luchadora.

Vuelvo a escribir, no para entretenerme, sino justamente por falta de tiempo. Seamos sinceros... no voy a darme "un rato para mí" de modo gratuito. Estoy demasiado acostumbrada a correr como para parar sin más. No voy a darme un baño relajante en esa bañera que no tengo. Como buena científica, aún tengo que probar que esto de darme tiempo no es perderlo sino darme la oportunidad de crecer cada día un poco más, de poner un hilo conductor a mi vida, de dejar de sobrevivir y empezar a vivir.

Vuelvo a escribir porque me gusta hacerlo. Porque soy una enamorada de la vida y de la realidad, porque disfruto analizándola, o contemplándola sin más. Porque en todo se puede ver un poco más allá de lo que se aprecia a simple vista, pero si no prestas atención todas esas pequeñas cosas pasan desapercibidas. Porque disfruto dejando que mis dedos bailen por el teclado, y plasmen en el ordenador lo que pienso; difruto bajando la guardia, escribiendo sin guión, leyéndolo después y sorprendiéndome incluso. Disfruto conociéndome a mí misma.

En definitiva... vuelvo a escribir porque estoy viva. Y no entiendo porqué a veces se me hace cuesta arriba. Querría vivir como escalo: aferrandome a las presas, pensando pero no mucho, sin tirones sino bailando; apretando cuando hay que apretar, descansando estratégicamente, y siempre disfrutando. (la escalada es buena escuela de vida...) Y sé que eso está en mí. Sólo tengo que darme el espacio suficiente para no ahogarlo.




No hay comentarios:

Publicar un comentario